A pesar de lo extremadamente simple que pueda parecer, resulta muy fácil confundir la comunicación asertiva con el estilo de respuesta agresivo. Esto puede deberse al echo de que ambos estilos tienen en común la característica de ser directos y defender los propios puntos de vista, sin embargo, la validación que conlleva la asertividad es la principal diferencia, y la que más trabajo cuesta entender. Debido a ello es importante que antes de prepararte para ser asertivo, ya hayas revisando previamente nuestro artículo sobre los otros estilos de respuesta disfuncionales. Para ser asertivo también necesitas previamente saber qué es la validación y la invalidación, para identificar específicamente qué es lo que se busca con la comunicación asertiva. Si no has revisado estos materiales, te recomiendo hacerlo antes de continuar porque puedes llegar a costarte trabajo durante la consulta.

Bajo el entendido de que ahora eres capaz de diferenciar entre un estilo agresivo y un estilo pasivo, así como sus consecuencias, podemos comenzar señalando que el estilo asertivo combina la parte positiva de los dos estilos anteriores: ser asertivo es defender tu punto de vista, haciendo válida la experiencia de los demás. Suena simple, pero mi experiencia terapéutica me confirma que es menos simple de lo que la mayoría de las personas creen. Frecuentemente, cuando existe alguna problemática emocional y/o interpersonal, suele haber una falta de asertividad. Es por eso que necesitas identificar los pasos necesarios para poder ser asertivo, así como el punto de la asertividad en el que te encuentras.

Ser asertivo sólo conlleva dos pasos.

1.- Validar el punto de vista de la otra persona y confirmarlo.

2.- Defender tu punto de vista.

Además de lo anterior, existe una regla o condición de oro que la mayoría de las personas suelen saltar: no puedes defender tu punto de vista hasta que no hayas validado correctamente el punto de vista de la otra persona y más aún.

¿Y cómo sé si es correcta?

Sólo pregunta a la persona que intentas validar, hasta que entre los dos se hubiera entendido que se validó correctamente. Para seguir adentrándote en el tema, primero revisa los seis niveles de validación (para pulir el paso uno), posteriormente, revisa el entrenamiento en comunicación para tener una guía que te ayude a comunicar eficazmente tu punto de vista para resolver conflictos. No te preocupes, sólo da Click aquí para continuar con el orden adecuado del entrenamiento en asertividad.